Ana
Maria
Maiolino

Extracto del texto de la exposición. El texto completo está disponible en portugués y en inglés

El deseo de Anna Maria Maiolino es tocar en lo que “es” (“é”). ¿Pero qué significa esto? Significa decir que la realidad es transparente y el misterio, aparente. Tal vez la imagen de la primera aparición de Dios a Moisés pueda evocar lo que estoy buscando expresar. Dios se presenta en la imagen de una zarza ardiente; un fuego que no consume el arbusto que está quemando. En otras palabras “qué es” (“o que é”) es el misterio de la esencia. No es imprescindible que la potencia se realice – que se consuma- pero es fundamental que la potencia se revele como esencia inmanente. La apariencia con que Dios se presenta no es del fuego que quema y destruye, pero de la fuerza capaz de arder sin destruir: potencia creadora.

Lo que Anna Maria Maiolino busca explicitar mediante su intervención es, en el Proyecto Respiración (Projeto Respiração), es el arte como energía creadora. Maiolino introduce en su video instalación, a través de una figura femenina de rojo que camina silenciosamente llevando adelante la llama de Prometeu, el deseo creativo de la pasión y del conocimiento. La artista proyecta en esta figura la fuerza de la resistencia y de la permanencia del arte, pero, al mismo tiempo, habita la casa con sonidos que traen de nuevo la vida en sus múltiples dimensiones, que la casa, al volverse museo, silenció.

Son sonidos que llaman por el nombre de Anna, por el nombre de Sandra, la que ejecuta; es el sonido de la flauta de su nieto; son susurros y palabras incomprensibles, respiraciones y suspiros; es la voz cansada de Anna declamando Santa Teresa de Ávila:

“Vivo sin vivir en mí.

Y de tal manera espero,

Que muero porque no muero.”